Para llegar a ser piloto comercial es obligatorio, y requisito indispensable para la obtención de la licencia de vuelo, superar un certificado médico de clase 1 con el que se deberá contar antes de matricularse en cualquier curso de piloto de avión.
El objetivo de la revisión es evaluar la capacidad psico-física del solicitante de forma que cumpla una serie de condiciones necesarias para realizar su trabajo de forma segura y eficaz, así como prevenir una incapacitación aguda durante el vuelo o una incapacitación crónica precoz. Por todo esto, no sólo se tienen en cuenta enfermedades o lesiones, sino también las secuelas que puedan derivarse de ellas.
En España, el organismo encargado de conceder las licencias de vuelo y establecer los requisitos psíquicos y físicos necesarios para su obtención, es la Dirección General de Aviación Civil, que vela porque l@s futur@s pilotos profesionales cumplan con las mejores condiciones físicas y mentales.
Así, los exámenes médicos iniciales para la obtención de un certificado médico de Clase 1, se llevarán a cabo en un AMC (Centro Médico Aeronáutico), mientras que los exámenes de revalidación y renovación se pueden delegar a un AME (médico examinador aeronáutico autorizado).
En este reconocimiento se explorará el sistema cardiovascular, respiratorio, digestivo y urinario; se realizarán análisis hematológicos y de orina al tiempo que se comprobará que se cumplen los requisitos musculares y esqueléticos, oftalmológicos y auditivos que permitan al/la aspirante ejercer las labores de su profesión de forma segura.
Igualmente, se prestará especial atención al perfil psicológico del/la candidat@ para descartar cualquier alteración de personalidad que le dejaría fuera de esta actividad.
Antes de comenzar las pruebas específicas, se realizará un cuestionario para abrir el historial médico y completar la información aportada en el formulario de solicitud previamente cumplimentado. Si se hubiese reportado alguna enfermedad, es recomendable presentar los informes médicos.
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A continuación, vamos a exponer, paso a paso, los requisitos médicos exigidos, acorde a la normativa PART-FCL, para la obtención del Certificado Médico Clase 1 necesario para una licencia de piloto, cumpliendo todas las regulaciones exigidas por la norma en el marco normativo europeo de EASA.
Existen dos modalidades de examen, SIMPLE y EXTENSO, con una periodicidad diferente:
EXAMEN SIMPLE: Cada año en < 40 años // Cada 6 meses en > 40 años
EXAMEN EXTENSO: Inicial y cada 5 años en < 40 años // Cada 2 años en > 40
Las diferencias entre las pruebas que se realizarán en un reconocimiento simple y en uno extenso, fundamentalmente, afectan al Electrocardiograma y a las exploraciones de Oftalmología y Otorrinolaringología.
Cuando se hacen pruebas continuas en las mismas personas, se pueden espaciar algunas exploraciones, asumiendo que no es necesario hacer una audiometría o una exploración profunda oftalmológica cada 6 o 12 meses, ya que no suelen aportar datos relevantes.
Es más práctico, eficiente y científico instaurar este nuevo reconocimiento basándose en la edad y el tiempo, sin olvidar que el buen criterio médico indicará, o no, en cada caso la conveniencia de aplicar pruebas exploratorias más profundas, aunque estuviéramos en una renovación simple. Por tanto, la periodicidad quedará como muestra el siguiente cuadro:
VISTA
Los requisitos respecto a este punto se encuentran recogidos en los estándares Visuales de Clase 1 PART-FCL.
En el reconocimiento inicial se realizará un test oftalmológico completo en el que se determinará la agudeza visual del/la aspirante respecto a diferentes parámetros: visión de cerca, de lejos, con gafas y sin gafas… Igualmente, se realizará el test de Ishihara para comprobar que no se padece ninguna alteración de los colores. Anomalías como el daltonismo o una miopía severa pueden resultar en un no apt@ para este certificado Clase 1. Aún así, en el caso del daltonismo, se puede optar a las licencias de carácter privado que requieren el certificado Clase 2 con el que es posible volar bajo algunas restricciones (sólo de día y sin instrumentos).
El uso de gafas no es un problema que imposibilite la calificación de apt@ en este reconocimiento de Clase 1. Se puede ser piloto con gafas. En el caso de presentar alguna alteración visual de tipo refractario (miopía, astigmatismo, presbicia, etc…) que haga necesario el uso de gafas, se estudiará cada caso en particular ya que la normativa vigente admite cierto grado de alteración visual. En caso de necesitarlas, en el certificado médico se indicará que debemos volar provist@s de ellas.
Así, en la evaluación inicial, los valores aceptados en cuanto a la cantidad de dioptrías varían según el error de refracción. Analicemos los distintos supuestos:
Visión a distancia: se evalúa la agudeza visual, midiendo la capacidad para ver líneas, formas o letras en una tabla a una distancia de 6 metros. En cuanto a la cantidad de dioptrías permitidas los valores varían según el error de refracción. Para un reconocimiento inicial, si necesita corrección, el error de refracción debe estar entre las +5.00 a -6.00 dioptrías. En caso de astigmatismo, no se debe exceder las 2.00 dioptrías, al igual que para la llamada anisometría.
Visión de cerca: se debe poder leer la impresión N5 entre 30 y 50 cm y la impresión N14 a 100 cm, con o sin corrección.
Visión de color: Se le realizará una prueba de visión de color con las placas de Ishihara (una serie de números o formas delineadas por puntos de diferentes colores, que puede ver fácilmente alguien con visión de color normal). Si se falla este test, se realizará una prueba de linterna que consiste en identificar correctamente una serie de luces de colores que, una vez superada, confirmará la aptitud visual para el certificado PART-FCL Class 1.
Función ocular: Los ejes visuales deben ser normales. No se puede sufrir de doble visión. Cualquier grado de desequilibrio del músculo del ojo requerirá una evaluación adicional por parte de un especialista ocular. Igualmente, no debe haber enfermedades agudas ni crónicas en los ojos ni en las estructuras circundantes.
Cirugía ocular: aquell@s aspirantes que se hayan sometido a una cirugía ocular serán, igualmente, examinad@s para conseguir una evaluación oftalmológica satisfactoria.
Oído
Se revisará la nariz, oídos, garganta y boca y se realizará una audiometría para verificar que la audición es la correcta para pilotar un avión de forma segura. Esta prueba se repetirá cada cinco años para aquell@s pilotos menores de 30 años, cada dos años hasta los 40 para pasar a ser anual una vez superada esta edad.
En esta prueba de audición se examina la capacidad de oír una conversación normal, con cada oído, a una distancia de 2 metros y de espaldas al médico forense (PART-MED.B.080 Otorrinolaringología Subparte (b) y (c)).
Para pilotos profesionales se requiere la realización de una prueba adicional llamada audiograma. Esta prueba consiste en escuchas de sonidos en diferentes frecuencias. La audición perfecta se mide como una pérdida nula de audición (0 decibelios – 0 dB) en esa frecuencia en particular. La disminución de la audición se muestra como una pérdida de decibelios (10, 20, 30, 40) a una frecuencia particular. Los niveles de audición requeridos y las pérdidas máximas permitidas son las que siguen:
Frecuencia – pérdida permisible
500 Hz – 35 dB
1000 Hz – 35 dB
2000 Hz – 35 dB
3000 Hz – 50 dB
Si puede oír una voz normal, en cada oído por separado, a 2 metros, no debería tener ningún problema. A medida que avanzan en su carrera, l@s pilotos pueden experimentar cierta pérdida de audición, a menudo debido al ruido ambiental que se sufre en los aviones. Si las cifras del audiograma alcanzan un nivel de 5 dB menos que las cifras de renovación anteriores, se requiere un audiograma anual.
Prueba cardiovascular – Electrocardiograma
Esta prueba se realiza cada cinco años hasta la edad de 30. De los 30 a los 40 será cada dos años, para pasar a ser anual una vez cumplidos los 41. Con ella se analiza el ritmo cardíaco para detectar cualquier anomalía que, debido a los cambios de presión que se producen en un avión, incapacite al aspirante. En el improbable caso de que aparezca cualquier alteración en su ECG, se deberán buscar pruebas adicionales con un informe de un cardiólogo.
Personas con un trasplante de corazón o de pulmón, by-pass, alteraciones vasculares o algún aneurisma no serían consideradas aptas para la obtención del certificado médico, ya sea de Clase I (pilotos profesionales) como de Clase II (Piloto privado).
Prueba de función pulmonar (espirometría)
Se realizará una espirometría para comprobar que los pulmones no tienen ninguna afección. Dado que la actividad de vuelo se realiza en las capas altas de la atmósfera, y aunque las cabinas de los aviones mantienen artificialmente una presión atmosférica superior a la del exterior y similar a la de cotas más bajas, resulta imprescindible que el piloto no presente anomalías en su sistema respiratorio. L@s aspirantes a piloto con alguna alteración pulmonar o con alguna dificultad respiratoria no podrán ejercer. Algunas dolencias, como el asma, requieren pruebas más específicas para evaluar el alcance de tal insuficiencia en cada caso concreto.
Prueba del aparato digestivo
Los problemas gastrointestinales, o enfermedades relacionadas, son causa de denegación del certificado medico. Este certificado debe acreditar que la persona no sufre de alguna hernia incapacitante, así como ninguna enfermedad intestinal crónica.
Prueba muscular y ósea
Posturometría – en esta prueba se mide la postura estática y el equilibrio, con los ojos abiertos y cerrados. Aunque no se requiere tener un físico concreto, aquell@s pilotos que vayan a ejercer en las Fuerzas Aéreas deberán cumplir unos requisitos mínimos de estatura y de longitud de brazos y piernas. Esto se debe a que las dimensiones de la cabina de un caza de combate son bastante reducidas y, en caso de emergencia, el cuerpo del piloto no debe ofrecer obstáculos al sistema de eyección de la aeronave pues se corre el riesgo de lesiones graves en extremidades o en la cabeza.
Análisis de sangre
Se realizará un análisis de sangre que descarte cualquier tipo de infección o enfermedad. La hemoglobina baja, comúnmente llamada anemia, necesitará un análisis más profundo para averiguar su origen, siendo causa de denegación del certificado de forma temporal. Igualmente, se evaluarán distintos parámetros como la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre o el nivel de colesterol, sin que exista un nivel de descalificación por este punto, pero sí una necesidad de informar sobre los posibles riesgos de tenerlo alto.
Radiografía de tórax
Este examen no es necesario según la PART-FCL Clase 1, pero puede ser necesaria cuando esté indicado por razones clínicas o epidemiológicas detectadas o previas.
Análisis de orina
Principalmente en busca de azúcar (diabetes), proteínas o sangre. Igualmente, para detectar un posible embarazo que, sin ser discapacitante, si limita el tiempo en el que permanecer activa.
En este análisis de orina también se busca descartar cualquier afección renal, así como comprobar que no hay restos de sustancias estupefacientes que puedan afectar las facultades cognitivas del aspirante.
Pruebas psíquicas
En este apartado se examinará al/la candidat@ para comprobar que no existe ninguna alteración psíquica o neurológica que le impida desarrollar su actividad de forma segura. Trastornos del sistema nervioso como la epilepsia causarán un “no apt@ “. Igualmente, las enfermedades de patología psíquica, agudas o crónicas, al igual que un historial de depresión, bipolaridad, trastornos de personalidad o de antecedentes de autolesión, serán motivo de denegación del certificado. Por todo ello, el/la especialista deberá, a través de pruebas tales como la Escala de ansiedad de Hamilton o el Cuestionario de Goldberg del trastorno bipolar, certificar que no existe ningún trastorno neurótico, de personalidad, de ánimo o comportamiento, así como desórdenes relacionados con el consumo de alcohol o sustancias estupefacientes que deriven en un “no apt@”.
El reconocimiento médico inicial concluirá con una evaluación final en la que se aportará toda la información arrojada por las pruebas realizadas acorde a la normativa y con la que el médico aeronáutico al cargo determinará si el/la aspirante cumple los requisitos para obtener el Certificado Médico de Clase 1.
Un certificado médico de Clase 1 emitido por un estado miembro de EASA, será aceptado automáticamente por cualquier otro estado también miembro de EASA, siendo reconocido en todo su marco operacional.
Las autoridades de Aviación Civil de determinados estados europeos acordaron el establecimiento de unos requisitos comunes de aviación denominados “Requisitos Conjuntos de Aviación” más conocidos por su acrónimo en inglés JAR (Joint Aviation Requirements). Dentro de las JAR-OPS (Area de Operaciones), el apartado JAR- FCL (Flight Crew License) regula y armoniza los requisitos médicos a través de las llamadas JAR-FCL3 o más familiarmente como JAR Médicas.
El no cumplimiento de cualquiera de los requisitos no necesariamente significa una descalificación. Existe una cláusula de flexibilidad por la cual el/la candidat@ podrá ser certificad@ siempre y cuando la anomalía causante no interfiera con la seguridad de la operación.
Ante un certificado médico Clase 1 denegado, es importante distinguir entre un “no apt@“definitivo y uno temporal. Una lesión cardiaca, padecer epilepsia, daltonismo o trastornos de personalidad, serán causa de denegación definitiva. Sin embargo, un índice de colesterol alto, una anemia o cualquier otra dolencia reversible, darán como resultado un “no apt@ “temporal que se podrá revertir tan pronto como la situación que lo provocó cese y se vuelvan a realizar las pruebas pertinentes. Un diagnóstico precoz de cualquier trastorno aumenta las posibilidades de recuperación y, por lo tanto, de retorno al vuelo.
En cualquier caso, el/la propi@ piloto deberá dejar de ejercer sus atribuciones tan pronto tenga conocimiento de una disminución de sus capacidades que pueda poner en peligro la seguridad del vuelo.
El precio del certificado médico clase 1 inicial es de unos 600€, bajando a 150€ para las renovaciones.
Para obtener una descripción más detallada de los requisitos médicos para la licencia de tripulación de vuelo, consultar el Anexo IV – Part MED de la Regulación 1178/2011 (EU).
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